Rosado: “La deontología me impide no atender”
La Generalitat “no va a tomar ninguna medida” contra los médicos que se declaren objetores del Real Decreto del Ministerio de Sanidad que prohibe la asistencia gratuita a los inmigrantes sin papeles. “Como médico que soy reconozco que la deontología me impide no atender a nadie. Tengo la obligación profesional”, subrayó ayer el consejero de Sanidad, preguntado sobre las declaraciones de la secretaria autonómica, Nela García, del 20 de agosto en las que afirmó que los médicos que quisieran atender a inmigrantes sin papeles debían de hacerlo en “horario no laboral y con recursos no públicos”.
Un total de 163 profesionales sanitarios valencianos (de los 1.731 en toda España) se ha inscrito en el registro de objetores promovido por la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (Semcyf) y a través de la campaña audiovisual Derecho a curar de la ONG Médicos del Mundo. La mayoría son médicos de familia, pero también hay internistas, psiquiatras o pediatras.
Semcyf cree “imprescindible” que el Gobierno de marcha atrás en la aplicación de una norma que, en su opinión, “vulnera gravemente los principios éticos de beneficencia, justicia y maleficencia”. Rosado confirmó que hoy se reunirá con Médicos del Mundo en Valencia para suscribir convenios para identificar a colectivos marginales que “en determinados casos puedan hacerse cargo de los gastos que suponga su tratamiento”.
El presidente Alberto Fabra terció en el asunto para insistir en que hay que “hacer un uso racional de los recursos públicos sanitarios” y recordar que “desde luego está garantizada la atención en casos de urgencia, embarazos, niños o enfermos crónicos”.